"TÁCTICA es lo que se hace cuando hay algo que hacer, ESTRATEGIA es lo que se hace cuando no hay nada que hacer"
Savielly Tartakover

jueves, 20 de noviembre de 2014

Arañas famosas en la literatura, en la gran pantalla y en obras de arte.

Foto del blog del rodador
El post de hoy ha sido gestado esta noche, mientras dormía. Alguien muy querido me comentó el respeto que sentían algunas personas hacía las arañas y pensé, ¡claro!, no es para menos, las tenemos muy famosas y muy sabías, aquí os presento las que me vinieron a la mente pero estoy segura de que hay muchas más. Este post es para ella.

La araña ha tenido un lugar destacado en la literatura y en la gran pantalla. Películas, dibujos, obras de arte, cuadros, novelas... en todas ellas, tenemos una araña que nos deleita con su sabiduría, su paciencia, su afán de lucha y otras características representadas en la araña.

Ya en la Metamorfosis de Ovidio encontramos la fábula de Aracne. En esta fábula nos cuentan como Aracne, hija de mercaderes, tejía como los ángeles, tejía de forma tan perfecta que se volvió engreída y fue capaz de retar a la Diosa Palas Atenea, Diosa de de la artesanía y la sabiduría, a tejer un tapiz en que cada una de ellas demostrara la perfección de su obra.

Empezó la competición y cada una de ellas se centró en su tapiz, en un tapiz perfecto, lleno de color y con imágenes que representaran la realidad. Al acabar de tejer los tapices, todos observaron boquiabiertos la perfección del tapiz de Aracne. El tapiz de la Diosa Atenea también estaba muy bien elaborado pero el de Aracne tenía los trazos muchos más finos y parecía más real. Aracne tuvo la valentía de tejer las aventuras de los Dioses con otras mujeres y la Diosa Palas Atenea, sintió rabia, por un lado porque había perdido la competición y por otro, porque Aracne mostraba a su padre en situaciones indecorosas. Fue tal la rabia que el castigo fue convertir a Aracne en una araña.

Hay muchos cuadros y esculturas que representan este fragmento de la obra de Ovidio, la más famosa es "Las Hilanderas" de Velázquez que representa de forma muy natural esta escena. Os recomiendo ver detalladamente el cuadro porque nos da muchas datos de cómo era la realidad de la época.

Si quieres ver el cuadro y saber algo más de él, puedes leer un post que le dediqué hace tiempo: http://saraialba.blogspot.com.es/2013/03/cuadro-las-hilanderas-de-velazquez-la.html


Otras arañas muy famosas en nuestros días son ELLA-Laraña del Señor de los anillos, o Spiderman o Aragog,  la araña de Harry Potter y la Cámara de los secretos.

En los dibujos animados tenemos también una gran estrella, la araña Tecla, de la Abeja Maya que nos enseña el arte de la paciencia, la capacidad de lucha, la constancia y la sabiduría.

Creo recordar que a la Bella Durmiente del Bosque le pica una araña y que por ello duerme hasta que aparece su príncipe para darle el beso eterno, aunque he de confesar que no estoy del todo segura, ya sabéis todos como me gusta imaginar.

En la música también tenemos una araña muy famosa, Lullaby de "The Cure", la famosa araña "it's having me for dinner tonigh".

Seguro que se me olvidan muchas arañas famosas, hay muchas, en todas las facetas del arte, las novelas, los cuadros, las esculturas, los cómics, la música... y todas ellas representan la paciencia para esperar a su presa, la constancia en rehacer su tela una y otra vez, la sabiduría en el arte de la caza, la capacidad de lucha y sobretodo los entresijos de la vida, representada en su gran tela de araña que en general nos muestra los altibajos de la vida.

Si alguna vez te visita una pequeña araña puedes sentirte muy orgullosa, seguro que se trata de una de las famosas. ;)


domingo, 16 de noviembre de 2014

Movimiento "Slow"

Imagen de la entrada de las Masia Rural

Leyendo el capítulo XIV de "El Principito" no pude evitar recordar las enseñanzas del movimiento slow, sabias enseñanzas, disfruta del tiempo, vive cada instante y se leal siempre a tus deseos.

"El quinto planeta era muy extraño. Era el mas pequeño de todos. Había apenas lugar para alojar un farol y un farolero. 

- Buenos días, ¿por qué acabas de apagar el farol?

- Es la consigna. Buenos días

- ¿Qué es la consigna?

- Apagar el farol. Buenas noches.

- Pero  ¿por qué acabas de encerderlo?

- Es la consigna

- Tengo un oficio terrible. Antes era razonable. Apagaba por la mañana y encendía por la noche. Tenía el resto del día para descansar y el resto de la noche para dormir.

- Y después de esa época, ¿la consigna cambió?

- la consigna no ha cambiado. ¡Ahí está el drama! De año en año el planeta gira más rápido y la consigna no ha cambiado.

- ¿Entonces?- Dijo el principito.

- Entonces, ahora da una vuelta por minuto, no tengo un segundo de descanso. Enciendo y apago una vez por minuto".

La consigna no ha cambiado, el día sigue teniendo 24 horas pero ca da vez queremos hacer más cosas en este tiempo, de forma que vamos incrementando la velocidad con la que hacemos las cosas. Las hacemos por lealtad, porque estamos acostumbrados y porque hay que hacerlas... pero no nos paramos a disfrutar de un buen momento, centrados en el momento actual, en lo que estamos haciendo justo ahora.

Pensamos en el futuro, en el tiempo que nos queda y en las cosas que aún tenemos que hacer  y nos olvidamos del aquí y el ahora, de disfrutar cocinando, limpiando, compartiendo con los amigos un buen partido de paddel o una buena conversación en familia.

Vamos tan corriendo que cuando llega el momento de dormir no podemos concentrarnos, repasamos lo que hemos hecho durante el día y lo mucho que nos queda por hacer. Hacemos como el farolero del principito, fiel a nuestros principios corremos, corremos y corremos para no llegar nunca al sitio que queremos porque el futuro siempre está lejos, nunca llegamos a él y mientras se nos escapa el presente.

Este fin de semana he estado en un sitio emblemático en la Comunidad Valenciana, el Molino de Galán, un lugar idílico en la naturaleza, que invita a disfrutar del presente, de cada momento, de cada instante, y gozar de la naturaleza observando a los animales y aprendiendo a soñar.

Os invito a conocerlo.











martes, 4 de noviembre de 2014

El Principito y los tres baobabs (Segunda parte)

El Principito y los tres baobabs (segunda parte)



Tal y como os conté en el post anterior, El Principito es un libro del que no te cansas nunca, cada vez que lo lees lo haces de manera diferente y descubres cosas que no habías visto en una primera lectura. Es un libro para todas las edades, lleno de símbolos y enseñanzas que nunca se olvidan.

Una de las lecciones que más me gusta es la del capítulo V. Si, es el capítulo en que El Principito nos presenta a los baobabs. El Principito quiere un cordero, desea un cordero que coma arbustos ya que está muy preocupado porque en su país crecen terribles baobabs.

"Hice notar al principito que los baobabs no son arbustos, sino árboles grandes como iglesias y que aun si llevara con él toda una tropa de elefantes, la tropa no acabaría con un sólo baobab.

El principito observó- "pero los baobabs antes de crecer comienzan por ser pequeños."

En efecto en el planeta del principito, como en todos los planetas había hierbas buenas y hierbas malas. Como resultado de buenas semillas  de buenas hierbas y de malas semillas de malas hierbas. Pero las semillas son invisibles. Duermen en el secreto de la tierra hasta que a una de ellas se le ocurre despertarse. Entonces se estira y, tímidamente al comienzo, crece hacía el sol una encantadora brizna inofensiva. Si se trata de una planta mala, debe arrancarse la planta inmediatamente, en cuanto se ha podido reconocerla. Si un baobab no se arranca a tiempo ya no es posible desembarazarse de él. Invade todo el planeta. Lo perfora con sus raíces. Y si el planeta es demasiado pequeño y si los baobabs son demasiado numerosos lo hacen estallar.

Es cuestión de disciplina. Cuando una termina de arreglarse por la mañana debe hacer cuidadosamente la limpieza del planeta. Es un trabajo aburrido pero fácil."

Así es, este capítulo está lleno de sabias enseñanzas y simbolismos. El cordero representa a los sueños, a la tranquilidad, a la ternura, cuando no podemos dormir contamos corderitos, se los enlaza con los sueños tranquilos y relajantes contando tiernas orejitas que saltan en un hermoso prado. Es el símbolo del sueño tranquilo y reparador.

El planeta es nuestro cuerpo, es nuestra casa, es donde se aloja nuestro espíritu, nuestro ser, nuestra alma, lo más intimo de nosotros y nuestra casa siempre tiene que estar limpia, limpia de malas semillas, limpia de todo obstáculo que nos impida llegar a aquello que nos hemos propuesto, a nuestros objetivos a nuestros sueños, a nuestra más bellos anhelos y deseos. Alcanzamos nuestros objetivos cuando habitamos un cuerpo preparado para conseguir todo aquello que nos proponemos, si el cuerpo no está en condiciones, nuestra mente no puede trabajar al mismo ritmo que si estuviera todo en orden.

Los baobabs representan los malos pensamientos, una vez crecen, son robustos como iglesias. ¿Hay algo más fuerte y robusto que una iglesia?. Toda acción siempre comienza por un pensamiento. Nace un pensamiento que desata una emoción y que se traduce en una acción. Siempre empezamos nuestras andaduras con un pensamiento pero ese pensamiento puede ser positivo o negativo. Al principio no se sabe, todos nuestros pensamientos están en nuestra mente, habitan en la tierra y no son ni buenos ni malos, sólo son pensamientos que hacen que nos movamos hacía algún sitio y tomemos una decisión, son pensamientos que desatan una emoción. ¿Qué pasa si los pensamientos son negativos?

Si esos pensamientos son negativos, se traducen en una emoción negativa. Las emociones no son buenas ni malas, sólo nos dan información para que tomemos una decisión, podemos vivir la emoción y si la consideramos negativa desecharla. No hay que dejar crecer las emociones negativas porque si un baobab no se arranca a tiempo ya no es posible desembarazarse de él e invade todo el planeta, lo perfora y puede hacerlo estallar.

Si nos centramos en una emoción negativa no podemos tomar las decisiones correctas, nos centramos en un determinado enfoque y no somos capaces de ver más alternativas porque ya estamos focalizados y centrados en algo que nos afecta, que nos inunda y que no nos deja ver más allá de lo que tenemos delante de los ojos, perdemos la perspectiva.

Doy fe de que así es, cuando algo que nos afecta mucho se instala en nuestra mente y no lo dejamos marchar pasamos las 24 horas del día (y porque no hay más) pensando en cómo pudo suceder y qué hicimos para que sucediera o qué podríamos haber hecho para que no sucediera, no podemos dormir y entonces nuestra oveja interna no puede comerse el baobab, cada vez estamos más ansiosos, perdemos la capacidad de escucha y cuesta mucho trabajo volver a la situación inicial de la que partíamos.

La vida es muy hermosa, cada día disfrutamos de nuevas experiencias que podemos clasificar como positivas o como negativas pero aún siendo negativas siempre son experiencias, nuevas enseñanzas y si nuestra mente ha descansado y está libre de baobabs podemos utilizarla a nuestra favor, crear nuevas situaciones y encontrar nuevos retos. Como dice mi grupo de música favorito "es mejor caminar que pararse y ponerse a temblar". 

En resumen, me encanta este capítulo, como muchos otros, porque nos enseña que vivir es cuestión de disciplina, al igual que aseas tu casa cada mañana, tu mente también debe permanecer limpia. Os recomiendo que uséis la atención plena y la herramienta del mindfulness.

¿Os habéis planteado por qué son tres los baobabs que crecen en el planeta del perezoso? Bueno, lo dejaré para otro post, la verdad es que El Principito da para mucho.









sábado, 1 de noviembre de 2014

El Principito y los tres baobabs (primera parte)

El Principito y los  tres Baobabs


He iniciado un nuevo proyecto que siempre había querido desarrollar pero que nunca me había decidido a llevarlo a cabo, como os he contado en otras ocasiones, soy lectora empedernida de todo buen libro que llega a mis manos y hace poco y gracias a algunos compañeros empecé a escribir mis primeros cuentos cortos, ¡menuda experiencia!. Les agradezco a todos sus ánimos y su tesón en hacerme sentir escritora.

Cuando escuché que la asociación alumni iba a formar un grupo de lectura no lo pensé dos veces y decidí colaborar, casualmente, el primer libro de lectura sugerido ha sido uno de mis preferidos, un clásico, un libro para todos los públicos, un libro que ha hecho viajar con la imaginación a todos aquellos que lo han leído. Un libro que puedes leerlo muchas veces porque cada vez que lo lees encuentras algo nuevo que te hace verlo desde un enfoque diferente. Para mí más que un libro es un tratado de filosofía. Me imagino que todos habéis adivinado ya de que libro se trata. Si, ese es, nada menos que "El Principito" de Antoine de Saint Exupery, no podía ser otro.

Empiezo en el club de lectura con uno de los libros que más me gusta y que he leído en varias ocasiones, que podría leer unas cuantas veces más y del que nunca me cansaría.

Uno de los capítulos que más me gusta de "El Principito" es el que nos habla de los tres baobabs, es una capítulo muy valido para el día a día y totalmente aplicable a nuestra vida cotidiana.

Antes de contaros lo que me gusta de este capítulo voy a hablaros de otra cosa que me entusiasma, de mi afición a la botánica y mi amor por el Baobab. 

El baobab es un árbol fascinante, para todos aquellos que no lo conozcáis os voy a hacer una breve presentación y después de ello, al igual que yo, os aseguro que deseareis conocerlo.

El baobab es un árbol majestuoso, puede alcanzar e incluso superar los 20 metros de altura. Tiene un tronco muy ancho, tanto que puede llegar hasta los 15 metros de diámetro.

Posee unas hermosas hojas verdes y brillantes que son caducas cuando llega la temporada seca, para ahorrar agua y reservas. Tiene unas grandes flores, generalmente blancas, que se abren sólo por la noche y debido a ello, sólo pueden ser polinizadas por los murciélagos. Su flor es muy efímera, sólo dura un noche, como las violetas, mi flor preferida, que una vez cortada son muy efímeras y delicadas.

Los frutos son alargados, miden aproximadamente 45 centímetros de largo, su pulpa es harinosa y comestible, le suelen llamar "pan de mono", aprovecho para presentaros un grupo buenísimo de percusión que se llama así.

Intentaba recordar cuando surgió mi amor por el baobab y mi deseo de conocerlo y recordé que una vez actuaba el grupo "pan de mono" en Alboraya , iba a verlos tocar y me interesó saber porque se llamaban así, me pareció un nombre curioso. Así me fui adentrando en la vida y leyendas de este majestuoso árbol.

Este majestuoso árbol vive en las sabanas de África aunque también hay algunas especies en Australia, su longevidad supera los 3000 años, ¡impresionante! y su tronco, hueco puede almacenar más de 6.000 litros de agua.

Todo en el baobab es de utilidad, su madera es empleada para hacer papel y cestos, la corteza se utiliza para preparar tisanas y sus hojas y frutos se comen.

Hay varias leyendas sobre este fascinante y majestuoso árbol, voy a contaros sólo una de ellas aunque seré breve ya que lo que me interesaba era hablar de la escena de El Principito  y los tres baobabs.

Cuenta la leyenda que los Dioses plantaron todos los árboles de la naturaleza, y entre ellos el baobab. El baobab era un árbol, bello, longevo, majestuoso, útil... y se sintió orgulloso de ello, para mostrar su belleza al resto de árboles y plantas comenzó a crecer, creció tanto, que llegó un momento en que daba sombra a todas las demás especies y les retrasaba su crecimiento. Cada día era más alto, sus hojas acaparaban todo el sol y eran hermosas, brillantes y muy atractivas, sus flores exóticas y de delicados colores llamaban la atención. El baobab se volvió vanidoso.

Los Dioses le ordenaron que parara de crecer  y permitiera que el resto de especies pudieran desarrollarse pero el baobab quería mostrarse en todo su esplendor y continuó creciendo. Los Dioses, como castigo, tuvieron que tomar una decisión y decidieron plantarlo del revés. Le dieron la vuelta de forma que lo único que vemos son las raíces que parecen que estén invocando el perdón de los Dioses.

En un próximo post os hablaré de la historia de El Principito y los baobabs.

Nota: la leyenda del baobab la leí en la siguiente página. Agradezco a su autor/a el que la haya compartido.
http://www.fotolog.com/am_wasserfall/67685112/