"TÁCTICA es lo que se hace cuando hay algo que hacer, ESTRATEGIA es lo que se hace cuando no hay nada que hacer"
Savielly Tartakover

miércoles, 16 de noviembre de 2016

La "S" de sistematización y serenidad- método fase

Hoy os quiero hablar de la S del método FASE para alcanzar la plena productividad. Como os conté hace unos días el método FASE consta de 4 partes:

1.- Foco
2.- Atención Plena
3.- Sistematización y
4.- Energía

El otro día empezamos por la última fase y os expliqué como obtener la energía para poder afrontar todos los objetivos del día a día. Poco después leí un artículo de Lou, que me gustó mucho y que explicaban qué tipo de alimentos son los que nos proporcionan mayor energía y nos ayudan a avanzar porque nos ahorran el consumo excesivo de energía en procesos involuntarios. Os lo tengo que contar, pero, para ser honesta, lo leí hace días y para contarlo lo tendría que volver a releer.

Hoy os voy ha hablar de la tercera etapa, la sistematización o la creación de hábitos que nos hagan minimizar los errores. La sistematización es el proceso de ordenar y clasificar la información de forma que cree experiencias internas que nos sirvan para tomar próximas decisiones. En esta fase es necesario sentarse, con serenidad e identificar cuáles son las tareas claves que me hacen avanzar en mis objetivos. Si no sé cuáles son mis tareas claves no podré sistematizarlas y por lo tanto, iré como aquellos del barco que iban sin rumbo pero, que al final, con tesón, perseverancia y paciencia, llegaban a la meta establecida.

¿Qué es lo que te gustaría conseguir? ¿Cuál es tu objetivo? ¿cuáles son las tareas que se repiten constantemente y que te hacen ocupar tiempo en cosas que no te permiten avanzar?

Una vez tengas claro lo que quieres conseguir, escríbelo y colócalo en un lugar visible para ti. Trabaja en un plan diario, cosas que, paso a paso, te acercan a tu objetivo final. Ya sabes, aquello de "divide y vencerás". Hazte una check list y prioriza las tareas. Céntrate en aquellas tareas que te aportan más valor, siempre teniendo en cuenta tus ritmos de trabajo y descanso. Observa a qué hora del día tu organismo está más activo y realiza entonces la tarea que más te aporta, aquella en la que es necesario que te concentres.

Una vez tengas la lista de tareas, se trata de crear el hábito. Si lo creas, realizarás la tarea de forma espontánea y con naturalidad, será como un juego. Algunos expertos hablan de que un hábito se crea en 21 días pero, en mi opinión, cada uno tiene unos tiempos para acomodarse y responder, así que cada uno repetirá la acción hasta que la tenga interiorizada y consiga que sea algo natural y sin casi esfuerzo, gradualmente y a veces, una vez interiorizada se pierde y has de empezar de nuevo.

Para acabar, os hablaré de la última parte, nunca nos hemos olvidar de medir los progresos (stop and think), cada mes, revisa, en qué punto de tu objetivo te encuentras, cuántas veces te has saltado el procedimiento, cuántos errores has cometido.... La idea no es martirizarte sino, como siempre, instaurar un procedimiento de mejora continua, todo se puede mejorar, pero siempre, disfrutando del camino.

En resumen, de esta fase es importante tener en cuenta los siguientes puntos:

1.- Nunca pierdas de vista tu objetivo final.

2.- Crea un plan de acción semanal.

3.- Crea hábitos de trabajo.

4.-Mide, cada cierto tiempo, tus progresos. Sobre esta fase me gustaría resaltar que no hay que obsesionarse por las mediciones. Confieso que, aunque sé que son necesarias, a mí no me gustan, creo que si haces las cosa bien, y disfrutando de lo que haces, los resultados llegan solos, no hay otra opción posible, saldrá lo que habías previsto y si no sale, como decía mi iaia, "lo que pasa, conviene". Algo te regala la vida, así que, disfrútalo.

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